28 noviembre 2006

Saliendo de Argentina

Hooola, ahí va un pequeño diario de lo que hicimos después de salir de Córdoba

DIA 14 DE NOVIEMBRE (martes)
Después de haber estado haciendo el idiota toda la noche en el pueblo de Jesús Maria (a las afueras de cordoba) tomamos un bus hacia Jujuy a las 9 de la mañana, paisajes deserticos y 12 horas de viaje, aunque bastante comodos. Pudimos dormir algo, leer y hacer algun sudoku. LLegamos a Jujuy a las 21.30, decidimos no buscar alojamiento en la ciudad, sólo dar una vuelta por la noche y aguantar hasta las 6 de la mañana que salía un bus para Humauaca, una vez allí podríamos dormir. Comimos en una pizzería, nos acicalamos en el servicio y dejamos las maletas en la "guardería de maletas" de la estación de autobús. Una vez que llegas a esta zona de Argentina se empieza a ver gente con rasgos andinos, hasta ahora no habiamos visto mucho, eso le daba un toque exótico al lugar. Entramos en un bar llenos de viejos tomando hoja de coca para echar una cerveza y salimos pitando para otro no menos deprimente, en el bar sólo dos grupillos de gente, unos viejos ligando con una chica y tres chicas jujuiyenses que no nos interesaban. Javi se acercó al grupo de las chicas, resultó que estaban celebrando el cumple de una de ellas. Allí nos sentamos con ellas a pasar las horas en vista de que nada mejor podiamos esperar de la noche. Según pasaban las horas a una de ellas le entraba la modorra y empezaba a acercar sospechosamente la cabeza a la mesa (o como decía nuestro amigo Pablo de Buenos Aires "a comer mantel", jejeje). Otra de ellas parecía entusiasmada con la situación y empezó a insinuarse e intentar convencernos de que nos quedaramos en Jujuy. Nos acompañaron a la estación de bus y alli nos tomamos una última cerveza, en un bar donde un par de tios se estaban peleando. La bella durmiente ya no aguantaba mas y acostó su cabeza sobre sus tetas para entrar en profundo sueño. Intercambiamos los correos, un choripan en puesto callejero superchungo y para Humauaca.

DIA 15 DE NOVIEMBRE (miercoles)
Llegamos a Humauaca a las 9 de la mañana después de tres horas de viaje en un autobús viejisimo y petado de gente de los pueblos de la zona. Con un holor de esos que se te graba en la mente durante dias y llenísimo de polvo. Fuimos al hostel, dormimos un poco y nos levantamos para dar una vuelta por el pueblo.
Un pueblo muy tranquilo, con casitas muy viejas y algunas de piedra. Humauaca ya está a una altura considerable por lo que movernos a ritmo rápido hacía que nos cansaramos mas de lo normal. Especialmente subiendo unas escaleras que nos llevaban hasta un lugar donde habia una curiosa estatua y muchos cactus.
Compramos un poco de hoja de coca y nos sentamos a masticarla en unas escaleras del centro del pueblo. Seguimos caminando por el pueblo, compramos la cena, conocimos a un chico aleman que viajaba solo y nos fuimos con él para el único bar del pueblo, donde había una mesa de ping pong. Alli nos metieron una paliza al ping pong los lugareños y de vuelta al hostel.

DIA 16 DE NOVIEMBRE (jueves)
El dia que mas temprano nos hemos levantado, jejej, a las 7 de la mañana, para dar un paseo por la montaña blanca que esta cerca del pueblo de La quebrada de Humauaca.


El principal atractivo de la zona son los paisajes y las posibilidades de caminatas por las montañas.
Estuvimos apenas una hora subiendo por las montañas, hasta que nos tiramos al suleo y nos pusimos a tomar el sol en lo alto de la montaña.
Despues de perdernos entre los sembrados del pueblo y saltar unas cuantas cercas de los capesinos, volvimos al hostel y nos marchamos para tomar un bus hacia la frontera con Bolivia, La Quiaca que se llama la ciudad, nos acompaño el chico aleman que viajaba solo, un poco aburrido el chico. Tres horas de viaje, pasamos la frontera caminando y llegamos al primer pueblo de Bolivia, Villazón.
Bastante cambio respecto a Argentina, mucho mas pobre y también mas barato. Compramos los billetes de tren, un tren que nos dijeron en Cordoba que sería de pelicula, en el que podias viajar en el techo al aire libre y la gente subía los animales a los vagones, nada mas lejos de la realidad, un tren como uno de renfe perro. Comimos en villazón frente a la estación de autobuses. Allí vimos una cosa de la que ya nos había hablado, al lado de nuetra mesa estaban los conductores de los autobuses, no tardamos mucho tiempo en darnos cuenta de que estaban borrachos como perros hinchandose de cerveza. Un alivio que optáramos por el tren. Para variar llegamos un minuto antes de salir el tren. El paisaje espectacular, eso si... todo como un paseito en burro, porque el tren no pasaba de 60 por hora.


Ya estabamos en Bolivia, camino de Oruro una ciudad en mitad del pais a casi 4000 mts de altura, no parecía nada atractivo, por lo que pensamos no quedarnos mucho tiempo. Nada que ver con lo que finalmente hicimos. Eso lo dejamos para otro post...

Besitos y Abrazos




4 comentarios:

Anónimo dijo...

¡hola granainos!lo estais pasando fatal...pobreticos mios...x cierto menos tomar el sol que cuando vengais en navidades aquí estamos tos blanquísimos.... un besito paulita (marbellera)

Tobias dijo...

joder.... tais haciendo mas kilometros que la furgoneta del equipo A.... o era mas que el coche fantástico... :P

molan mucho las foticos... y cordoba tiene mu wena pinta!!!


saludetes!! nunca os pillo conestaos!!

Pablo dijo...

Vaya par de cabrones, qué envidia me estáis dando. Carlos, cuídate la barriguita, que me han contado que no te da tiempo a llegar al baño :).

Anónimo dijo...

chivi!!!! ya te vale.. me has cambiado x una boluda para pintorrearle el brazoooo!!!! ;)